Por lucas@calvoconbarba.com
Este post me gustó mucho, por lo claro y los ejemplos que aporta. @gabrielcatalano
Esto no quiere decir que los departamentos legales o de Marketing dejen de tener sentido, ni mucho menos, sino que han de modificar sus actitudes y comportamientos para conseguir sus objetivos. No tiene sentido que se comporten como acaban de hacer la gente de Tupperware, a través de su despacho de “matones” legales, mandando a Kurioso una notificación legal para eliminar un contenido absolutamente inocuo de su blog como si eso fuera a dañar la marca, y cobra mucho más sentido comportamientos como el de la gente de Jack Daniel’s, que buscando el mismo fin, saben redactar un comunicado que consigue empatizar con quien lo recibe, y se convierte en un acción de comunicación, más que en una amenaza de matón bocazas de patio de recreo.
Lee el artículo completo, vale la pena ver los ejemplos! 🙂
La clave está en entender que tomarse en serio las cosas no implica necesariamente ser serio. O al menos no en el sentido de no tener sentido del humor. De hecho, el sentido del humor es uno de los sentidos que más hemos de trabajar en esta nueva etapa de comunicación social, que se hace pública y visible no sólo para quien la recibe, sino – potencialmente – para todo el mundo. Hay marcas que lo tienen claro, y saben reaccionar con humor incluso a las provocaciones, siendo las absolutas ganadoras de este nuevo medio. La semana pasada he conocido dos muy buenos ejemplo de esto, uno de Oreo, marca que realmente borda la comunicación últimamente, y otro de una marca al menos para mí desconocida, El Pastoret, pero que parece haber entendido a la perfección la capacidad “abre-puertas” que tiene el humor.
Lee el artículo completo, vale la pena ver los ejemplos! 🙂